El 31 de marzo de 1969, Lunes Santo, la Hermandad del Museo se prepara para realizar su salida procesional. La Virgen de las Aguas espera en su templo ataviada como siempre, salvo que, por aquellos años, aún llevaba las joyas que llevaba prendidas en su manto de terciopelo azul liso.
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| La Virgen de las Aguas preparada para la salida |
El Cristo de la Expiración también espera su salida.
El Cristo empieza a salir por la puerta de la Capilla del Museo. La Virgen le sigue después.
Ya están en las calles de Sevilla
El Cristo de la Expiración del Museo recorre el andén del Ayuntamiento
donde lo espera, como todos los años, un gran público.
Ese Lunes Santo recién cumplidos los once años realizo mi primera estación de penitencia
acompañando a la Virgen de las Aguas. Familia y vecinas acuden a la procesión para verme.
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