Que la televisión fuera el eje central de las casas populares de Sevilla en esta década de los años 70 es una cuestión innegable. Por aquellos años, la televisión se encendía desde la mañana a la noche cuando aparecía la "carta de ajuste" ya pasadas las doce. Y eso que al principio solo había un canal de televisión que, eso sí, se apagaba religiosamente por las tardes para que las madres escucharan la radionovela de turno mientras cosían la ropa o remendaban calcetines y pantalones. Los niños merendábamos -colacao con picatostes- escuchando "Simplemente María" o "Lucecita". Muchos vaticinaron entonces la muerte de la radio pero se equivocaron de medio a medio porque hoy sigue tan viva como entonces o más.
En las fotos siguientes, el fotógrafo aficionado documenta en su propia casa del barrio de San Marcos cómo es posible montar un árbol y un belén encima del mueble del televisor. Afortunadamente, en aquellos primeros años de la tele, los aparatos eran voluminosos y permitían toda suerte de objetos encima, desde flamencas o toritos bravos hasta muñecas o retratos. Pero un árbol de Navidad y un niño Jesús, hombre...
Horror vacui